miércoles, 28 de mayo de 2008

Desde la Enfermería

Estoy hecho una piltrafa humana. Volé de temperatura todo el día de ayer. Mi casa parece una enfermería de campaña. Es que mi hijo también está enfermo. De hecho sostengo que él me contagió, aunque también es posible que la combinación Pocas Horas de Sueño + Mucho Trabajo + Facultad + Transporte Público haya hecho su aporte para con este estado de salud.

Hay carilinas, servilletas de papel que ofician de carilinas, papel higiénico que ofician de carilinas. Todo es bienvenido a la hora de descargarse las vías respiratorias. Hay juguetes en la cama, almohadas en los pies y anitibióticos de dudoso gusto en cuanta mesa, mesita, cómoda o repisa se pueda encontrar. (Digo yo, ¿¿¿Quién dice que los remedios para chicos tienen gusto rico???).

Por si fuera poco, tenía que levantarme para ir a rendir. Como pude me arrastré hasta los pies de la cama, por poco me faltó hacer cuerpo a tierra para llegar a esa ducha despabiladora en la que quería quedarme a vivir. Me vestí de ambo oscuro a rayas, camísa al tono, obvié la corbata para no terminar de morirme por culpa de mi ya estropeada garganta y partí para la facultad. Sin auto, pero con bufanda.

Si tuviera que buscar un ejemplo que ilustre el cambio de actitud mía para con la facultad, creo yo que lo de ayer sería la postal ideal. Yo, que ante cualquier eventualidad absolutamente banal e irrelevante, la prefería antes que ir a la facultad, yo, justamente yo, estaba sentado volando de temperatura y habiendo dormido poco más de 30 minutos (sí, no estoy exagerando) esperando mi turno para rendir.

Debo confesar que confluyeron distintos factores a esta nueva forma de encarar las cosas. Uno de ellos es la presión de ser padre y pretender resolver en poco tiempo lo que estuviste rascándote por años. Otro es la suerte de encontrar gente que vale la pena. Y cuando las dos cosas se juntan, las ganas motivadas por un hijo y las personas que en vez de ponerte piedras en el camino te ayudan a seguir adelante, uno siente que no todo está perdido.

En fin, quería que sepan que no estoy muerto. Casi, pero todavía puedo escribir. Cuando logre recuperarme del todo, de seguro que me pondré al día. Pero no es fácil si la poca fuerza que queda la tengo que usar para ponerme al día en el trabajo. Pero peor esta Brunito, que no entiende qué es lo que le pasa. Tendrían que verlo, con sus cachetes cual manzanitas. Parece un tirolés mamado de villa Gral. Belgrano.

Por lo pronto, debo reconocer que cuesta mucho poder salir de la cama si cada vez que uno prende la tele, se encuentra con las mismas noticias políticas de hace 80 días. Es eso o ver Bailando por 15 minutos de Fama las 24 horas en 5 canales de aire más los del cable. Mirar la tele puede ser perjudicial para la salud. Mirarla todo el día, definitivamente puede llegar a matar.

Bueno, a seguir el día. No se quejen. Peor es estar trabajando con temperatura.

14 comentarios:

gonza dijo...

mejorate, che!

YadaYada dijo...

Esto confirma que el contenido de la televisión actual es uno de los grandes motores de la economía. Nadie prefiere quedarse en casa :P

Mejorate.

hugo dijo...

que se mejore bruno

considerando su trabajo, u lugar a donde concurre bastante genete me imagino, y el hechod e teenr un hijo pequeño, el año próximo le sugiero que se de la antigripal, yo me la doy hace como diez años, no es que no se vaya resfriar, sino que la pasa mucho más atenuada.-

OliverX dijo...

Cuidate y reponete.
Te recomiendo un buen libro para evitar caer en la patética televisión nacional.

Stella dijo...

uhhhhh, mirá, te mando un camión de peperina!!! No sabes como pega!!! Te armas un porrito de eso y sos refeliz!!!
ajajajajaa

Besos acordobesados y con barbijo!
Cuidate!!!!

@PaloMedrano dijo...

Jajaja, un amigo al que le tocó estar 12 días internado por una operación en la pierna, me dijo algo parecido con respecto a la televisión: realmente no tenés otra cosa para hacer mientras estás ahí, pero te quema (literalmente) el cerebro.

Con sólo imaginar aquel calvario de ver en continuado a Mirtha, la Canosa, Rial, Fabbiani, Marley y Tinelli, ya se me murieron unas cuantas neuronas.

En fin, de todas formas, por su relato detecto que su problema es otro: La combinación trabajo + facultad + hijo, es letal.

Conclusión: Recibasén de una buena vez y dejese de embromar!!!

La Dueña dijo...

Cuídese del frío, besos a Brunito.
y cómo le fue en examen?
Besos.....con barbijo por la dudas...naaaaaa!!!

Bugman dijo...

Sopita de pollo, camita con la frazada hasta la nariz y good show.
Que se mejore, mi estimadísimo.

La Mascarada dijo...

Querido! que se mejore rápido!

Nota: que grande y hermoso está el niño...

Besos!

Ivana Carina dijo...

Bruce!!
Mi vida! Cuidate y mejorate!!! Pobeshito Brunito!!!
Y encima el frío polar ya les llegó!!
ABRIGATE!!
Un besote!!

Claude dijo...

Tener fiebre y estar engripado o resfriado son cosas que apestan. El mundo se vuelve opaco y sofocante, y cada pequeña incomodidad adquiere la relevancia de un sueño desagradable y exageradamente lúcido. Bah, así me pasa a mí.
Que te mejores, y suerte en las actividades, sobre todo en el estudio.

capitanfla dijo...

Fuerza macho!

Un abrazo.

Anónimo dijo...

¡¡¡Claro que un hijo le pone pilas a nuestra vida!!!

Pero para estar con todas las luces para el trabajo, el estudio y los hijos ¡¡hay que cuidar mucho la salud!! ¿stamossss?...

Y abriguesé que este frío y su estado gripal no son buena combinación...

Abrazote!!!

Anónimo dijo...

Bruno acabo de enterarme que andas malo, al parecer ya te has recuperado...brother como dices tu, a darle!! besos.