De Setentistas, Setentosos y Afines

Sin lugar a dudas, creo que estamos llegando a un punto en el que todo nos molesta.

La intolerancia de los supuestos tolerantes esta en su máxima expresión en estos días que corren. Ya no se puede opinar, y aunque uno intente no dar juicios de valor sobre nada, se ve en la obligación de tener que lidiar con quienes no se ubican en tiempo y espacio.

Hay blogs para todo, y cada uno es libre de entrar al que se le antoja, leer y comentar. Ahora, cuando uno llega a un blog en el que se emiten opiniones para el debate, tranquilamente se puede debatir, tal es el caso de Todos Gronchos. Hace un tiempo en el que no se perdona pensar distinto, sin embargo. Pero bueno, no siempre se puede llevar adelante un debate como la gente.

En un sitio como el que mencione recién es normal que hayan suseptibilidades, por cuestiones lógicas de ideologías.

Lo que no tiene sentido es cuando uno intenta llevar adelante un blog en el que no se tienen ganas de opinar de política. Yo tengo este humilde espacio para decir lo que pienso de todo lo que pasa a mi alrededor, que es éste, no voy a uno de manualidades a criticarlos porque no piensan en el hambre de la gente. Y a ello me limito, opino aquí y manifiesto mis pensamientos en los comentarios de otros blogs afines a mi ideología.

Pero si conjuntamente con otro grupo de gente de diferentes ideologías, de las que ni siquiera me importa conocer, decidimos poner en marcha un blog para recordar la cultura de una época, es porque tenemos ganas de rescatar la estética de un período de nuestra historia, sin mezclar lo social y político.

En Te Cuento los Setenta hace un par de semanas que no podemos decir nada sin que nos tilden de superficiales por no hacer referencias a la situación política de esos años. No se puede hablar de las salidas, de los boliches, del Jet Set setentoso sin que uno sea un idiota que se dejó sodomizar por los militares. De las peores cosas que a uno le pueden llegar a decir es "poco comprometido".

Si tengo ganas de putear contra alguien, lo escribo acá, este es mi espacio para calentarme. Si lo que quiero es hablar de Charly, tengo mi blog de García. Si quiero escribir delirios, hablo con Jean Paul y le pido un espacio en su blog. Y si tengo ganas de hablar de música de los setenta, voy a Te Cuento los Setenta y punto. No tengo por qué verme obligado a relatar una serie de hechos tristes propios de la argentina.

Una cosa es poner las cosas en su contexto y otra muy distinta es limitarnos a hablar de una época en función de su momento social, político y económico. Si nos dedicamos a esto último, no hay década de la argentina que se salve.

Entonces seríamos terriblemente idiotas si en una charla de café nos acordamos de todos los recitales de grupos extranjeros que fuimos durante los ´90 mientras había gente que se quedaba sin trabajo. No podemos recordar el Mundial de Italia porque somos unos superficiales que no nos ponemos a pensar en la inflación que había por esos años. ¡Qué desastre que somos! ¿Cómo podemos hablar de Los Beatles mientras en la Argentina se entraba a bastonazos en las facultades cuando estaba Onganía en el poder?

Me parece que estamos mezclando el ganado. Cada uno tiene momentos para recordar y cada recuerdo es disparado por algo que lo remite a ello. Pero cuando vemos la Gioconda no pensamos en la gente que moría de hambre en Francia mientras Leonardo vivía de la Corona.

Cada uno es libre de pensar lo que quiere, pero cuando de entrada se pone un límite, aclarando que se intenta rescatar la estética de una época, su cultura y vida social, y se especifica que no queremos mezclar la temática con los acontecimientos de ese entonces, estamos delimitando una frontera que no queremos ni tenemos ganas de traspasar. Si Stella es Católica y se siente libre con su conciencia comunicando en su blog que se llevará una misa para reparar el sacrilegio sufrido por el altar mayor de la Catedral Metropolitana, tiene que poder hacerlo libremente sin que nadie entre a echarle en cara a ella el papel pasivo de la Iglesia durante la dictadura argentina. Como si hubieran sido los unicos pasivos. En un país que en ese entonces tenía 26 millones de personas, si un grupo de locos vestidos de verde hace un desastre, es porque los 25 millones y tres cuartos restantes no les calento nada de nada. Y si así y todo no te gustó, no lo leas, no comentes, andate, no vuelvas más, tirale tomates, lo que quieras, pero no ataques. ¿Tan dificil es dar una opinión?

Todos sabemos que mientras el Seleccionado Argentino salía Campeón del Mundo, a 10 cuadras había un centro clandestino de detención. Pero hasta Menoti se abrazo con Videla y hoy en día lo recuerdan por haber firmado una solicitada pidiendo la publicación de una lista de desaparecidos.

Cada cual que se haga cargo de los suyo. Para opinar hay distintos sitios. Al que no le gusta como piensa uno, no lo lee y punto. A mi no me gusta como piensa Eduardo Aliverti y no lo escucho. Sería un idiota si lo escucho igual y después lo llamo por teléfono para putearlo por pensar así.

Pero es algo del argentino. Nos transformamos en seres paranoicos que vemos un enemigo al acecho en cuanto lugar vayamos. Ya no se puede poner ni siquiera un Feed. A mi me gusta saber quien me lee y como llegaron a mi sitio. Esta bueno ver que hay gente que lo tiene agregado a uno, y quizás ni enterados estábamos.

Todo molesta. Molesta como se piensa, molesta como uno se viste y todos le preguntan a otros que hacía durante esos años. Si Usted en 1977 iba a bailar a Tarot, es un enfermito que no se daba cuenta que a pocas cuadras de allí, en Olivera y Falcón, funcionaba el centro de detencion "Olimpo". Pero nadie tiene en cuenta que quizás era un pibe de 18 años, sin ideologías políticas o con ellas, pero que solo quería salir a divertirse, lo poco que podía hacer.

En tiempos en que está de moda ser Setentista, nosotros quisimos ser Setentosos, que no es lo mismo.

Ya llegarán los tiempos en que nos preguntemos que hacíamos mientras las valijas con dinero volaban clandestinamente. Seguro que llegará. Porque en un país en el que siempre se juzga al que se fue por lo que hizo, y no al que está por lo que hace, todos seremos siempre culpables y complices.


Sociales:

El Señor F. cree que yo pienso antes de escribir y por eso me otorgó el Blogger Sapiens Award, creado por Claude, de Un Kilo.

En función de ello, tendría que otorgarselo a otras personas, pero ya saben mi indecisión a la hora de premiar.

Pero sin lugar a dudas, que un jòven de 18 años crea que yo escribo cosas interesantes, me hace suponer que no todo esta perdido. O que estamos hechos pelota.

Para el que guste seguir leyendo cosas un poco más livianas que estas, actualicé el Blog de García y escribí en Certificador de Ilusiones, de Jean Paul.

Recomendación:

Si tienen ganas de leer cosas lindas, no como aquí donde todos nos puteamos hasta en jeringoso, pueden pasar por De Todo y Más... del Detective de Mascotas. Con ese nombre debe ser un buen pibe, además si escribe de cualquier cosa, a mi me cae bien.

Sociales Parte 2:

La Dueña y el Rocco tuvieron la delicadeza de entregarme otro premio. Y si yo estoy para ligues hoy. Este se trata del "Premio Blogger Canino" y se otorga a aquellos que como los canes, son fieles, compañeros, inteligentes, dan la pata y se lamen los genitales...ah, no, esto útimo no, perdón.

Bueno, como ya aclaré más arriba, soy terriblemente indeciso a la hora de premiar, simplemente porque me cuesta elegir entre todos los blogs que tengo a la derecha, ya que si estan ahí por algo es. Dicho esto, agradezco enormemente el premio!

Aclaración: Mi costumbre es escribir con una idea o sin ella, y casi nunca releo lo que escribí hasta que está posteado. Así que si ven errores de gramática, ortografía o lo que fuere, sepan disculpar. Se agradecen que me los marquen.

Aclaración 2: Para el que pregunte, lo que suena de fondo es una canción de Spinetta "Que ves el Cielo". Esta versión es a duo con Charly García en un recital que dieron en 1980 Serú Giran y Spinetta Jade en conjunto. Esas cosas que disfrutaban los jovenes de antes... El día que alguien se avive, lo masterice y editen oficialmente, de seguro que sería un éxito de ventas.