domingo, 9 de diciembre de 2007

Nosotros, Vosotros, Ellos...

Dos posts. Porque el hecho de no publicar, no quiere decir que no tenga nada para decir. Bueno, en realidad quiere decir que se me ocurrió todo hoy...

La capacidad que tenemos los argentinos para sentirnos consolados por estar inmensos en el mal de muchos es sinceramente llamativa, al menos para mí que siempre consideré una injusticia algo que fuera eso, una injusticia, sin importarme si me afectaba a mi, a tres más, a todos en el país o a tout le monde.

Esto viene desde bien abajo hasta los más altos estratos de nuestro ranking de importancia. ¿Cuántas veces se escucha la frase “no me puedo quejar, con lo que le pasó a fulanito”? Muchísimas veces el argentino medio se siente incapaz de expresar su disconformidad a determinado aspecto de la vida por culpa, porque sabe que a otro le pasó algo peor.

Y es que en eso también somos ignorantes. Digo somos porque yo también me incluyo.

Anular el sentimiento de insatisfacción simplemente porque al de al lado le va peor no va arreglar ninguno de los dos asuntos, ni el de al lado ni el suyo.

Dentro de todo este análisis quiero dejar afuera a todas las circunstancias por voluntad de Dios, cuestiones del destino o, simplemente la suerte (depende de lo que usted crea) hace que un ser humano o un país o una región se encuentre atravesando un mal momento ajeno a cualquier factor intencional. Sólo intento referirme a la realidad argentina, a lo que nos hacen desde afuera, lo que nos complica la vida más de lo que ya está.

Jamás quise decir por esto que tenemos que convertirnos en una manga de arrogantes que andan por la vida sin importarles un comino si al vecino le paso un tractor oxidado por encima de la entrepierna.

No es lo mismo ayudar y comprender al prójimo que conformarse con lo que a uno le toca por no querer hacer sentir mal al otro, porque de este modo no solo no estoy ayudándolo, o entendiéndolo, sino que además me estoy quedando inmóvil ante una situación probablemente cambiable. Ello sin dejar de lado que nadie merece que le tengamos lástima. Nunca jamás se debe sentir lástima por otro ser humano. Hay que ayudarlo, no sentir lástima.

Es que muchas veces uno se queda sin hacer nada ante una injusticia sólo porque a otro le pasó algo más grave o porque lo mismo le sucedió a todos a la vez.

El quedarse impávido ante una desavenencia nos va convirtiendo de a poquito en resentidos o, en el mejor de los casos, en rebaño.

Si el combustible sube y en el diario me dicen que es el litro de nafta más barato entre Uruguay, Chile y Brasil ¿Cambia algo?

Si el boleto del transporte público aumenta y el gobierno nos cruza diciendo que son las tarifas más baratas, en comparación con Brasil y Chile ¿Nos hace sentir afortunados?

¿Realmente sentimos que podría ser peor?

Bueno les tengo una noticia: Si, podría ser peor. Siempre podría ser peor, siempre.

Pero también podría ser mejor y queda en uno en decidir qué es lo que quiere.

Es algo lógico que la Argentina podría estar peor, pero a esta altura falta que nos digan que tenemos el kilo de papas regalado en comparación con Namibia, Guinea Bissau y Somalía.

Pero también es cierto que éste país fue un estado fuerte en su momento. Un lugar con una ubicación propia en el mundo, además de estar al este de Chile y al sur de Brasil.

Y esto no es una “argentineada” más como que tenemos la Avenida más larga del mundo, inventamos el Dulce de Leche, el Colectivo y la Birome (ninguno es cierto), sino que realmente sucedió en algunos puntos de la historia de este país.

A mi no me importa si en Chile la nafta sale más cara que en Argentina, a mi me importa que en Chile, a pesar de tener el combustible más caro que acá, viven mejor ¿Se entiende?

¿No era que Argentina tenía que vivir para adentro y dejar de mirar los modelos extranjeros?

Estos son los criterios que utilizan en el estado nacional, provincial, municipal, comunal, departamental o como corno lo denominen en donde usted resida de esta Confederación Republicana, que muy poco tienen de ambas definiciones.

Hasta hoy un Ministro de la Provincia de Buenos Aires decía que la tasa delictiva del conurbano bonaerense era inferior a la de San Pablo.

Con esa visión de las cosas entonces pongamos accesos en todos lados para personas que se movilizan en sillas de ruedas, como en Chile. Pueden arrancar por los edificios públicos si quieren, para dar ejemplo ¿Vió?

También podríamos tener los transportes públicos de nuestros vecinos trasandinos o de los cariocas, ya que quieren cobrar lo mismo.

Y de paso, rajen a los ministros sospechados por corrupción, como en Brasil, así tenemos la transparencia más baja, ¿Pero nos acercamos un poquito, no les parece?

Es el plan del Gobierno para que el país esté apaciguado, con tantos pobres dando vueltas, a usted no tiene por qué afectarle una merma de su salario ¡No sea avaro hombre!

Siempre se empareja de la mitad para abajo, es más fácil ya que sale solo. Simplemente hay que ser inoperante, ineficaz, descarado y soberbio, el resto sale solo.

La mentira es el deporte nacional del gobierno y el conformismo del pueblo es el reglamento con el que se juega.

9 comentarios:

Ivana Carina dijo...

Siempre nos comparamos con los de afuera y no nos miramos un poco, acá adentro del país!!!
Y por otros cuatro años más, será lo mismo.....
Paciencia... aunque ya se me está acabando!
Besotes, Bruce!!!
P/D: Dos al precio de uno, pero uno mejor que el otro!!! Muy bien 10 ¡Felicitado!

OliverX dijo...

"La mentira es el deporte nacional del gobierno y el conformismo del pueblo es el reglamento con el que se juega."

Excelente. Aunque agregaría que la Biblia de los argentinos es la Viveza Criolla.

Abrazo, maestro.
Me gustaron mucho los dos posts.

Nicolás Lucca dijo...

Ivy: Paciencia, mucha paciencia. Yo creo que con nacer aca ya tenemos la mitad de la escalera al cielo garantizada.

Oliverx: Es verdad! La viveza criolla...que boludos que somos!

Abrazo!

Little Butterfly dijo...

Brunito; tendria que escribir sobre tu post, pero quiero decirte que quedé encadilada con ese bebé precioso!!, ese es tu nene??, no puede ser tan divino...

Me saco las ganas de insultar, es muy tierna esa imagen.. Muy esperanzadora..

PD: ahora si se puede comentar en mi post, no me di cuenta y quedo inhabilitado.. Problema resuelto, muchas gracias por avisar!!!

La candorosa dijo...

Las personas, en su mayoría, siempre opinan o actúan por "comparación"...

Por tal no olvidemos el aquel viejo axioma que dice:
"Las comparaciones siempre fueron odiosas".

Saludos

Nicolás Lucca dijo...

Little Butterfly: Si, si, es mío. Al menos eso dice en la partida de nacimiento. Y a mi tambien me hace olvidar de estos avatares del ser argentino.

Candorosa: Las comparaciones siempre fueron odiosas, es verdad. Y es así, todas las personas actúan por comparación. Indefectiblemente todos lo hacemos alguna vez. El problema radica en la magnitud que adquiere la comparación al tratarse de actos de gobierno, no?

MM dijo...

Bruno, usted debe decir como yo: Mía la vaca, míos los terneros. Y listo

Respecto de su nota, muy bien escrita y justa, no se amargue, ya vendrán tiempos en que nos reiremos de ellos como pasa hora, pero al revés...

Nicolás Lucca dijo...

Groncho: Gracias por el halago ya aguardo con ansias ese momento.

Anónimo dijo...

El argentino es informista con todo y al mismo tiempo tiene ese sentirse superior al no tener el problema del de al lado.
Buen análisis!